Cada vez es más común ver a gente que ha tapado la cámara de su ordenador, para evitar que los piratas informáticos puedan tomar fotos o grabar vídeos con ella.
Hay varias formas de tapar las webcams, desde pegar una cinta adhesiva hasta una cubierta fabricada especialmente para este fin.
Instituciones públicas como la Guardia Civil y la Policía también lo recomiendan: